05 marzo 2010

El eterno retorno

Por fin se han abierto. Son diminutas, blancas, sus pétalos se vuelan con una simple brisa, y sus hojas apenas abarcan la yema de un dedo. La planta con flores más minúscula de nuestros campos significa uno de sus mayores acontecimientos: la primavera biológica ya está aquí, ya no hay vuelta atrás. Las demás plantas pueden adelantarse o atrasarse en su floración, el tiempo puede venir seco o lluvioso, soleado o nublado, pero, a partir de ahora, una especie tras otra florecerá, insectos distintos resurgirán cada pocos días, y las aves africanas regresarán. Otro año más, la vida ha triunfado silenciosamente sobre todas las adversidades, ha superado los días abrasadores del verano, las noches de hielo del invierno, el vendaval y la lluvia. Estas pequeñas rosetas de hojas han sobrevivido al embate de todos esos elementos infinitamente más fuertes que ellas mismas, y ahora se preparan para reproducirse, hoy como hace millones de años, como en un eterno retorno que da sentido al tiempo. Empieza la primavera: Erophila verna ha florecido.

11 comentarios:

Ángel Zamora dijo...

un milagro que tenemos la suerte de disfrutar cada primavera... Cada año que pasa siento mayor admiración.

Saludos.

Raúl M. Olmos dijo...

Entonces, ¿Esta es la que da el pistoletazo de salida? Espero que a las demás no les haya pillado desprevenidas y se hayan enterado de que la primavera ya está aquí, bueno, en unos días!!
Me gusta como lo has contado, y me gusta también ver como unas delicadas y pequeñas plantas han podido con todas las adversidades un año más para cumplir su objetivo, mantenerse sobre la superficie de la tierra....
Saludos naturalista

El Naturalista dijo...

Anzaga, el de estas fechas para mi sigue siendo el cambio más increíble que pueda verse en la naturaleza a nuestro alrededor.

Ramuol, más que "dar el pistoletazo de salida", Erophila verna es, de las primeras flores de la temporada, la que yo he visto que suele ser más constante y un pelín anterior a las demás, quizá sólo días. Por ejemplo, este año han florecido cólquicos, antes, pero otros años no florecen. Los almendros este año han florecido pocos días después que Erophila. En fin, que yo diría que sí, que el anuncio más fiable del fin del invierno biológico es Erophila verna. Un saludo.

Bibiano Montes dijo...

Por fin se atreven, se ve que estas son las primeras en lanzarse a la "orgía" primaveral que nos espera en los próximos meses, por el sur y con este tiempo ,ya ha comenzado aunque lenta y ordenadamente.
Me encanta tu descripción y como nos has mantenido con la intriga hasta el final,
Saludos,

El Naturalista dijo...

Ya se van asomando, sí, pero, como dices, Bibiano, muy lentamente, nada que ver con el mes de marzo "explosivo" para la vida que tuvimos el año pasado por aquí. Es lo que tiene la región mediterránea: imprevisibilidad, y por tanto diversidad. Un saludo.

JAVIER dijo...

Exacto Naturalista, lo que Nietzsche filosofó a finales del S.XIX en su teoría del eterno retorno es lo que pasa a menudo con las plantas, personas, pensamientos...
Si Zaratrusta levantara la cabeza y viera el mundo en el que vivimos...
Saludos naturalistas
(calceolusycentaureas.blogspot.com)

El Naturalista dijo...

Sí, Javier, aunque no creo que en los campos retorne exactamente la misma secuencia de hechos una y otra vez, como parece que Nietzsche pensaba que ocurre. Retornos hay, desde luego, pero, aunque efectivamente el título de este post está inspirado en esa idea filosófica, yo creo que se trata simplemente de un fenómeno natural derivado de la traslación de La Tierra, y no algo más profundo - ¡ni menos! ¡Saludos, naturalista!

Josélez dijo...

Increíble! Mi más sincera enhorabuena para el agudo observador que hace este blog, ya que no conozco ningún blog cuya entrada tenga a las anuales como protagonistas, y menos aún a la más diminuta de nuestras plantas y sus flores. Me alegro mucho de ver tanta naturaleza por aquí, es como si saliéramos al campo contigo.

Saludos, Naturalista, un placer siempre pasarse por aquí

El Naturalista dijo...

Claro, Josélez, es que pasar por alto a los más pequeños (plantas anuales, insectos, etc.) supone perderse nada menos que la mayor parte de la biodiversidad. Y eso es un lujo que no podemos permitirnos. La naturaleza no sólo son aves, mamíferos y árboles o arbustos. La naturaleza, principalmente, funciona a base de anuales e insectos por aquí. Y si queremos comprenderla, hay que fijarse en todos esos pequeños compañeros. No serán grandes, pero a su manera pueden resultar incluso más espectaculares que los vertebrados. Un saludo, y gracias por tus felicitaciones.

Fcº Javier Barbadillo Salgado dijo...

Algo empieza a moverse silenciosamente a nuestros pies, algo que acabará por extenderse a todo el paisaje. La gran puesta en escena a cargo de miles de seres diminutos, los tramoyistas de la Vida.

Enhorabuena por este homenaje.

El Naturalista dijo...

Ese algo que ya apunta claramente ha sido temporalizado por milenios de clima mediterráneo, y pese a este frío y estas lluvias sigue en marcha. Pocos años como el que tenemos demuestran mejor que gran parte de la llegada de la primavera se debe no a la temperatura sino a las horas de luz. Saludos naturalistas.